1.Comer seis veces al día “acelera el metabolismo”
El fraccionamiento de cinco o seis tiempos de comida en un plan de alimentación estructurado esta proyectado para evitar así excesos en los tiempos de comida y no para “acelerar el metabolismo”. Mantener una ingesta cada dos o tres horas mantiene a nuestro sistema digestivo satisfecho y evitamos sobre cargar los tiempos de comida.
2.Los alimentos “sin gluten” son más sanos.
Los alimentos que contienen gluten pertenecen en su mayoría a los provenientes del trigo y están indicados para las personas que se han sometido a pruebas de sensibilidad al gluten y resultan positivas; esto, no necesariamente significa que son productos mas saludables o “mejores”, solo son alimentos modificados en su composición en donde retiran el componente para los que son intolerantes al mismo.
3.Comer huevos es malo porque aumenta el colesterol.
El huevo es un alimento con alto valor nutricional, completo y equilibrado. Contiene proteínas de calidad gracias a sus aminoácidos esenciales; es rico en hierro, vitaminas y no altera el colesterol en sangre.
4.Comer por la noche es malo.
Si bien es cierto, la cena o comidas nocturnas no equilibradas pueden alterar la composición corporal debido a su posible acumulación por falta de actividad por la noche, esto no significa que debe omitir el tiempo de comida o limitar el consumo de alimentos. Todos los tiempos de comida deben incorporar nutrientes de calidad para que el organismo pueda realizar todas sus funciones en condiciones óptimas. Mantener un equilibro es la clave.
5.Es necesario hacer “detox” cada cierto tiempo.
El cuerpo y sus órganos cumple una función especifica para cada necesidad. El hígado y riñones son los encargados de limpiar el cuerpo de los productos de desecho que producen, sin necesidad de batidos “detox”, estos batidos cumplirán su función diurética, eliminando líquidos y desinflamando intestino, nunca “desintoxicando”.
